No es posible en todas las ocasiones, pero a veces una alternativa a los viajes de empresa es simplemente no hacerlos. La madurez de las sistemas de videoconferencia y telepresencia hacen posible que cada vez más empresas elijan valorar la necesidad de desplazarse.
La cultura, no sólo la de empresa sino la de la sociedad en la que se trabaja, influye intensamente en las decisión de adoptar tecnologías como la videoconferencia o la telepresencia para sustituir las reuniones presenciales. En sociedades como la española, el contacto humano y el cara a cara son factores clave también en el mundo de los negocios.
Sin embargo, la progresiva sofisticación de la tecnología ofrece opciones que han ido supliendo algunos sus defectos tradicionales. La videoconferencia es una herramienta de uso habitual en muchas empresas gracias a su progresiva sofisticación y mejora de la calidad. De todas formas, a menudo las posibilidades que ofrece no son suficientes. Es conocida esa sensación a la que los usuarios a menudo se refieren como “de no estar reunido” al usar estos sistemas.
La llamada telepresencia inmersiva usa imágenes de alta definición y tamaño natural para simular hasta el máximo detalle lo que sería una reunión cara a cara. Se trata de superar los límites establecidos por la videoconferencia y ofrecer una experiencia mucho más cercana a la realidad.
La infraestructura requerida es elevada y sigue siendo un factor desmotivador para adoptar este tipo de solución. Requiere de la adecuación de una sala y una inversión en equipo importante. De cualquier modo, el retorno de inversión que puede suponer una implantación exitosa de estas tecnologías resulta a menudo muy interesante.
Este tipo de enfoque sigue teniendo sus restricciones. Probablemente no será aplicable para temas comerciales o formativos, pero puede ser una alternativa de bajo coste para gestionar reuniones internas. Los usos más comunes son reuniones de alto nivel, negociaciones con partners estratégicos de la empresa, habiendo también aplicaciones específicas como la telemedicina o educación a distancia.
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